Armas Cortas


Las Armas cortas tienen varias desventajas claras. Para empezar, el disparo viene en ellas acompañado de un molesto retroceso -más acentuado aún cuando se usa munición Magnum de elevado calibre-, que desvía el tiro.

Por ello, su dominio requiere un largo periodo de entrenamiento y una habilidad excepcional. Previamente adiestrado y contando con un punto de apoyo, un novato podría hacer blanco al disparar con un rifle o fusil en un campo de tiro. En cambio, si empuñara un arma corta esto sería mas improbable. Incluso un usuario habituado a las armas cortas tendrá que esforzarse para hacer blanco en objetivos que se encuentren a más de 15 Mts.
Entonces, ¿Cual es la cualidad redentora de las armas cortas? ¿Qué las hace tan deseable para el mercado civil y militar?
 En una palabra: Su portabilidad. Hoy día las pistolas modernas son lo Ultimo en capacidad de fuego transportable. Además, en términos generales, su evolución histórica ha permitido diseñar modelos cada vez más pequeños y ligeros, cuya potencia de fuego es cada vez mayor.
Un hito en esta progresión se dio a finales del XIX. Se introdujo entonces un nuevo tipo de arma ligera, que habría de hacer la competencia al revolver y acabaría por dominar el mercado de armas cortas: La pistola automática. Sobre la base del mecanismo de carga automática -cuyo pionero fue Hiram Maxim-, el alemán Hugo Borchardt invento, en 1893, la primera pistola de carga automática de éxito comercial. Esta se accionaba por retroceso con junta de codillo que permitía separar el cañón y la recamara al disparar. Se alimentaba a partir de un cargador de ocho cartuchos y tenia tal tamaño que a buen seguro, obligaba a disparar con ambas manos. No obstante, un nuevos modelos refinaron el concepto de la pistola de recarga automática. Así, Bergmann, Mauser, Browning entre otros, no tardaron en producir armas de tipo semiautomático. El aporte de Browning fue especialmente trascendente, pues diseño la legendaria Colt .45 Auto, una pistola en la que se basarían muchas otras armas ligeras posteriores.

Pistola Sig-Sauer P-220. 
 
Para el desarrollo del P-220, SIG colaboró con J.P. Sauer & Sohn de Alemania, por lo que el P220 y todas las pistolas subsecuentes de SIG son propiamente conocidas como pistolas SIG-Sauer. El P220 opera por medio del método de cerradura de retroceso corto, inventado por el pionero  John Browning.

La Sig-Sauer P-220 está construida en torno a un sólido armazón de aluminio y usa una corredera estampada en metal de grueso calibre, con una pieza terminal soldada en la boca. El Bloque de la recamara es una pieza torneada por separado, encajada en la corredera y retenida mediante el uso de un rodillo pasador. Se fabrica en diversos calibres: 9 mm Parabellum, 7.65 mm parabellum, .45 ACP y .38 Super. Hay tres controles en la parte izquierda del armazon: el cierre de la corredera, la palanca de desamartillado y la palanca de desmontanje. Tirar de la corredera hacia atras y luego soltarla introduce un cartucho en la recamara y amartilla el arma. Presionar la palanca de desamartillado levanta el fiador del martillo, el cual gira bajo la presion de un muelle hasta que el fiador penetra en la muesca de seguridad. Asi, el martillo se mantiene lejos del percutor y este , a su vez, fijo por la accion de una aguja de bloqueo.

Su manejabilidad y tamaño compacto la hicieron modelo favorita del ejercito suizo y alemán, ademas de innumerables cuerpos de policía. Su sobredimensionado guardamontes responde a la demanda de su utilización con guantes tácticos. Así mismo esta pistola fue el primer modelo de SIG SAUER que incorporo el desamartillado del arma por pulsador.